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| Albarrán Cabrera |
Invocaciones
a Ramón Palomares
Ruego por otros poderes
pasar el umbral de las
llamas
destilar la hiel
sahumar los hígados
adivinatorios
colgar las ranas
hacer que la serpiente haga
más concéntrica la noche
elevar soles y eclipses
desmantelar el sonido de los
blancos
que traen poder a las
sementeras
El maíz estallará entre las nubes
las conchas de quina bajarán
a los mercados
el itsú dará olor a las
cocinas
el murciélago de serpentina
presidirá la oscuridad
y alumbrará tus pasos
El arco bajará hasta las
lagunas y mudará sus hechizos
tus ojos en las cavernas
exhalarán venenos para la huida
Te despedirás para siempre
sentado sonriendo con
dulzura
sosteniendo toda la tierra
como a una mano de moler
Ellos querrán destruirlo
todo
y tu lucha será más tenaz
que las tinieblas
cultivarás otros cielos
amamantarás otros animales
dispararás tus flechas
las plantas y las flores
crecerán allí como sementeras
y todo alcanzará el aire de
eternidad
porque disfrazarás la
arcilla
esconderás tu origen en
otras llamas
ante dioses sangrientos y
blasfemos
Allí estarás para perpetuar a
la rana
a la lluvia patas blancas
al reino que perdimos
Seguirás acostado bajo
tierra
cavando pasadizos para
atraer la luna
Soplarás al sol como barro
y crecerán las escamas
las rosas de las serpientes
las túnicas de los papagayos
la vegetación húmeda que reverdece
al cielo
Buscarás santos para
quemarlos en tus vasijas untadas de cacao
desandarás y lograrás una
victoria contra el pasado
buscarás los altares
asaltarás los museos
y destruirás las colecciones
privadas del mundo
Sobre tu alma colocarás
águilas
correrás entre las aguas de
las acequias
te
ocultarás durante el verano
para saltar como colibrí
sobre flores sedientas
dormirás debajo de los
guamos
volarás entre los búhos
te descolgarás del perfume
de los árboles
hasta caer sobre las colinas
Tendrás cara de murciélago
hembra
Embetunado de achote para
los dioses
Atada con línea de algodón
entrarás al reino de la oscuridad
Tejerás tu velo en luna de
páramo
sólido silencioso
Te peinarás y adornarás con
plumas híbridas de pájaro
para entrar en cólera y celo
Abrirás tus piernas
piedras color de aceituna
Rechazarás el habla de esas
mujeres blancas capturadas ayer
que mirarás con curiosidad
Abatirás la piel de venado
sobre la luz de la tarde
y el toro metálico cortará suavemente
las aguas de la laguna
Desaparecerás en medio del
furor de la neblina
Todo se oscurecerá
los dientes de los dioses
rechinarán
los corazones refulgirán
desde el fondo
y la sangre de urao será
doncella de sal
Del libro: Como piel de ángel (1980)
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